"Si simplemente nos jubiláramos, dejaríamos de prestar un servicio a alguien", dicen.
SAN FRANCISCO.- Dustin Moskovitz, cofundador deFacebook y ex compañero de
apartamento de Mark Zuckerberg, es para muchos el multimillonario por esfuerzo
propio más joven del mundo, pero el joven de 27 años no está bebiendo champaña
en el Caribe.
En vez de eso, ha
preferido volver al escenario de las pequeñas empresas de San Francisco,
incluso pese a que la inminente Oferta Pública Inicial de Facebook podría
elevar su riqueza aún mucho más.
Moskovitz y su
amigo Justin Rosenstein, también un ex empleado de Facebook y con una fortuna
de 150 millones de dólares, dirigen una compañía
llamada Asana, que acaba de
lanzar la primera versión pagada de su servicio de administración de proyecto
por internet. Durante una entrevista reciente en sus oficinas discretas en el
distrito de Mission, ambos dijeron que acuden a trabajar diariamente porque,
pese a que de antemano son dueños de una fortuna, todavía quieren hacer algo
productivo de sus vidas.
"Cuando
pensamos en trabajar, lo pensamos como un acto de servicio, como un acto de
amor a la humanidad", dijo Rosenstein, de 28 años.
"Si
simplemente nos jubiláramos, dejaríamos de prestar un servicio a alguien",
agregó Moskovitz.
Si bien tal
sentimiento idealista podría parecer demasiado fácil viniendo de dos jóvenes
que nunca más tendrán que preocuparse de ganar dinero, ambos siguen trabajando
pese a que no tienen necesidad. Al igual que el mismo Zuckerberg, no parecen
interesados en la acaparar los reflectores ni el estatus social que les puede
brindar la riqueza.
Al igual que Zuckerberg,
visten de manera informal: Moskovitz una camisa fuera del pantalón y Rosenstein
suéter y calzado deportivo. Se mezclan de inmediato en las calles de su
vecindario, que rebosan de jóvenes de veintitantos años con pantalones de
cintura baja.
Lo que los
diferencia, reconocen, es su absoluta libertad para buscar una visión
particular de la manera de cambiar el mundo. Parece que no tienen dudas de que
su software hará exactamente eso. Después de todo, al igual que los ingenieros
originales de Facebook, han visto de antemano una vez cómo su código cambió al
mundo.
Asana busca
acelerar el progreso humano al cambiar la manera en que la gente trabaja en
equipo, dijo Rosenstein. Se invierten muchas horas de trabajo en hacer
"trabajo sobre el trabajo", dijo Moskovitz. Ambos aseguran que Asana
ayudará a la gente a librarse de esos problemas y dedicarse a hacer cosas más
importantes.
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